Las creencias que te limitan
«Un bonsái no deja de ser un árbol normal puteado para que no crezca».
Esto me lo dijo un día mi pareja mientras paseábamos.
Y sí, señoras y señores, un bonsái es un árbol normal al que, desde pequeño, se le ha ido modelando y limitando para que no crezca, para que no se desarrolle, para que se quede pequeño y manejable. Para poder tener el lujo de tene un árbol dentro de casa sin vivir en una mansión de aquellas que se ven en las películas.
Es decir. Imagínate.
Eres una semilla con el potencial para ser un árbol enorme. Que se desarrolle lentamente con el paso de los años. Que haga flor y fruto, que de más semillas y se pueda reproducir y recomience el ciclo.
Y, de repente, llega una mano humana y empieza a limitarte. A decirte que no puedes crecer hacia aquí, que tus hojas no pueden ser tan grandes, que tus ramas tienen que quedar encogidas.
Y te quedas así. Y cada vez que intentas crecer, ¡patam! Se te limita.
Pues esto es lo que les pasa a muchas personas. Tienen un potencial enorme cuando nacen, un potencial para ser adultas funcionales, para poder gestionar sus emociones, para poderse conectar al placer desde la madurez.
Pero hay factores limitantes. A veces la familia. A veces los amigos o las relaciones que vamos estableciendo. A veces la situación socioeconómica. A veces, muy a menudo, casi siempre, la sociedad.
Y todos esos factores acaban provocando un montón de ideas limitantes en la persona. Un montón de barreras que impiden que la persona se pueda desarrollar en todo su esplendor.
Si lo piensas, seguro que también tú tienes ideas limitantes. Y luchar contra ellas tú sola puede ser muy complicado.
Es por eso por lo que he creado este ejercicio, muy sencillo pero con mucho poder. Un ejercicio que te guiará a hacerte preguntas y descubrir cuáles son aquellas ideas limitantes que tienes.
Y una vez las descubras será mucho más fácil empezar a trabajarlas.
Con este ejercicio conseguirás:
- Dedicarte un rato a reflexionar sobre ti misma
- Descubrir de dónde vienen tus ideas limitantes
- Poner nombre a aquellas ideas que tienes sobre ti misma y que, quizá, están impidiendo que crezcas hacia donde tu quieres.
- Remover emociones: hazlo en un momento de calma y en un rato que puedas dedicarte a mimarte cuando acabes.
Si tienes dudas sobre el ejercicio, ¡pregunta en el grupo de Telegram!
